El actor estadounidense está en Colombia para el rodaje de Running with the Devil, del director Jason Cabell. La película se rueda con apoyo de la Ley 1556, con los servicios de producción de Jaguar Bite
El rodaje en Bogotá de Running with the Devil se llevó a cabo en las localidades de Usme, Chapinero y la Zona Industrial de Bogotá. La película está basada en la experiencia personal del director del filme en la época que hizo parte de la Fuerza de Operaciones Especiales de la Armada de los Estados Unidos (Navy SEA), donde le fue asignado un proyecto con las plantaciones de coca que se desarrollaban en Colombia.
Running with the Devil es protagonizada por el Nicolas Cage, actor ganador del premio de la academia y un globo de oro por su actuación en la película Leaving Las Vegas de 1995. Dentro del largometraje, Cage interpreta a Cook el emisario de un gran narcotraficante que supervisa el envío de droga desde Colombia hacia los Estados Unidos.
Esta cinta además cuenta con la actuación actor Peter Facinelli, reconocido por su participación en la saga Crepúsculo, quien había estado previamente en Colombia participando en Encerrada (2014) del español Víctor García. "Es una especie de cinta sobre el tráfico de drogas y el recorrido de éstas a través de Colombia, Centro América y Estados Unidos. Propone conocer todos estos personajes interesantes involucrados en ese camino. Tiene un poco de acción y suspenso, es como una especie de historia de Quentin Tarantino, como "Pulp Fiction", no es así de chiflada, pero tiene esos elementos", dijo Facinelli a Noticias Caracol.
La llegada de estos artistas de Hollywood se suma a la de actores como Tom Cruise, Antonio Banderas, Lauren Cohan y Mark Wahlberg quienes han venido a trabajar en producciones cinematográficas que se han desarrollado en diferentes territorios del país. La más reciente producción con apoyo de la Ley 1556 fue el largometraje estadounidense Mile 22, del director Peter Berg que se llevó a cabo en las calles de Bogotá.
La Ley de Locaciones (Ley1556) promueve el territorio nacional como elemento del patrimonio cultural para la filmación de audiovisuales y, a través de estos, la actividad turística y la promoción de la imagen del país, así como el desarrollo de la industria cinematográfica colombiana. Esta ley, entre 2012 y 2016, le dejó al país más de $86 mil millones por la filmación y producción de películas extranjeras en el país.
